Integralisimo te propone este finde preparar unos deliciosos y versátiles merengues caseros integrales. Una receta ideal para reciclar claras sobrantes y qué no sabes qué hacer con ellas. Entonces aprovecha y haz unos merenguitos ideales para comer solos o con tu relleno preferido. También como complementos de rellenos de tortas y tartas dulces. ¡El cielo es el límite! ¡Anímate!
Hablemos un poco sobre la receta:
Preparar estos merenguitos es sencillo porque no tiene complicaciones en cuanto a su elaboración y presenta más de una ventaja. Los ingredientes son pocos y de uso frecuente, fáciles de encontrar en cualquier mercado. Además, podrás cambiar cualquiera de ellos según preferencia o necesidad sin inconvenientes.
A pesar de que es una receta rápida de hacer, hay algunas consideraciones que tienes que tener en cuenta antes de comenzar. En primer lugar, esta preparación necesita batirse bastante porque las claras tienen que llegar al punto letra o también llamado cinta. Por ende, lo conveniente es disponer de algún elemento de cocina como batidora de mano o de pie.
¿Qué es el Punto letra?
El punto letra consiste en batir los huevos y el azúcar a máxima velocidad durante 10-15 minutos. La cual pasado este tiempo se vuelve espesa y que al levantar las varillas batidoras se puede escribir una letra con la mezcla sobrante que cae, quedando visible sin desaparecer con el resto de la preparación.
Sobre los ingredientes:
Estos merengues secos dependiendo de la disponibilidad de ingredientes y textura final que desees obtener, puedes prepararlos con tres o cuatro ingredientes. Y es que el azúcar en esta clase de receta juega un papel importante en la consistencia de esta preparación. Entonces, antes de empezar te recomiendo leer y que analices las siguientes observaciones.
Las claras se baten a máxima velocidad para lograr principalmente volumen. Y en esta oportunidad se baten con azúcar integral para obtener estabilidad. Este azúcar también se conoce como azúcar sin refinar, mascabo, de caña, moreno, etc. La misma, además de endulzar, aporta un sabor característico a caramelo de provechosa utilidad.
Sin embargo, no es el único tipo azúcar que puedes usar porque también sirve el azúcar integral impalpable o mascabo impalpable. De hecho, puedes emplear ambas dos para obtener resultados más suaves y firmes. Para ello se batirán las claras junto al azúcar integral hasta el punto letra y luego con movimientos envolventes se añade el azúcar integral impalpable.
Al contrario, si utilizas un solo tipo de azúcar, ya sea integral impalpable o común integral, se agregará en un solo paso, el de batido. Un dato relevante y no menos importante es que al emplear solo azúcar impalpable obtendrás merenguitos más suaves, frágiles y quebradizos.
Por último, con respecto a la cantidad de azúcar, la primera opción sería utilizar una cantidad de azúcar que iguale el peso de las claras y la segunda es usar el doble de su peso. Si usas el doble de azúcar tendrás resultados mucho más firmes. Igualmente con ambas opciones obtendrás de manera exitosa unos merenguitos integrales.
Sobre las claras:
La manera tradicional de obtención de claras es separándola con cuidado sin romper las yemas. No obstante, no es la única, ya que en tiendas de repostería o cotillón puedes conseguir las claras de huevos deshidratadas (albúmina). Lo que resulta magnífico en recetas que solo llevan claras evitando desperdicio o acumulo.
Ciertamente, es un producto excelente, además de accesible, es sumamente ventajoso. Porque no solo optimiza los tiempos de elaboración, sino que prolonga su vida útil, durando más tiempo sin descomponer con la misma velocidad y rapidez. Y sobre todo que al estar pasteurizadas su consumo es seguro, evitando riesgos como la salmonela.
Quizás vale destacar que preparaciones echas con albúmina, como el merengue suizo, resultan más estables cuando se exponen al aire libre. Es decir, conservan mejor su forma sin perder forma y textura aunque estén expuestas al calor. Generalmente, una clara de huevo se prepara con 4 gramos de albúmina, diluyéndose en 30 ml de agua (leer instrucciones del envase).
Sobre los merenguitos:
Una manera práctica de moldear los merenguitos es colocar la preparación en una manga de repostería. Independientemente, puedes o no aplicar una boquilla, aunque de esto dependerá el aspecto final que desees obtener. Una recomendación es hacerlo sobre papel manteca o lamina antiadherente dado que es una mezcla que se pega y cuesta desmoldar.
Sobre la cocción:
Finalmente, los merengues caseros integrales se secan al horno a una temperatura de 100 Grados / 212 Fahrenheit durante una o dos horas. Luego, una vez fríos, se almacenan dentro de un recipiente lo más hermético posible en un ambiente fresco y seco. De esta forma, se conservan evitando posibles humedades. Los mismos pueden durar hasta 3 meses.
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